Estaban allí Rinno Rienuari un joven de 20 años
que pasaba de la agresión a la risa muy fácilmente y sin ningún control con
múltiples tatuajes en sus brazos y la
estridencia de la música metálica que
emulaba con su voz, a la vez baila
moviendo la cabeza circular y violenta, el hecho de saber que contrajo el
síndrome de inmunodeficiencia al pincharse con agujas compartidas en orgías de
adictos, ocasionó su conflicto interno
que luego exteriorizo, esta sumamente arrepentido porque no escucho los
concejos, ahora clama una segunda
oportunidad pero siente que la sociedad ya lo
crucifico; En este mismo lugar
esta Álvaro Jose, se encuentra a un lateral del cuarto, agachado con las manos hacia delante y la
cabeza hacia tras, con voz grave y de habla lenta reiterando a breves instantes
que él es artista plástico, con movimiento
nerviosos exclama que no cree en nada, ni en su propia madre que lo abandono por irse
tras un hombre; describe como vigilaba a las jóvenes que pasaban al colegio,
este personaje se siente incomprendido,
sufre de paranoia y esquizofrenia. Nancy comparte en ese mundo
chiquito del escenario, sus penas y sufrimientos que la llevaron a ser adicta al alcohol, su vida entre hombres y mas
de 4 abortos no la dejan, le pesan en la conciencia, escucha voces que la
persiguen que la acorralan y llanto de niños que la condenan, fue victima de
una madre castigadora, que le pegaba con cables y mangueras para darle una
lección lamentablemente ella aprendió
muy bien y repitió la enseñanza,. A su lado Codelia joven de rostro candido e
inocente que apenas se le entienden palabras, padece de atrofia y es convulsiva fue recluida en el
psiquiátrico pues su madre murió y su abuelita que la crió falleció quedando
desamparada, en su lenguaje confuso siempre describe la escena en la que un
hombre entra a su casa, revisa y como fue abusada sus crisis terminan en
convulsiones fuertes. Se levanta con pausa el señor Arturo Ras, quien hace 5
año atrás fue empresario, distinguido en
su trabajo con reconocimientos como el mejor, pero los nervios lo acorralaron por el exceso, el
estrés lo fue asfixiando hasta llevarlo al desespero y descontrol, vivía para
trabajar y no trabajaba para vivir, aparentaba lo que no era y presumía lo que
no tenia, llegó al extremo de las deuda hasta
perderlo todo, desvaría entre el mundo ficticio y su mundo real.
Este dicho que muchas son las veces que lo citan :
“De Músico Poetas y Locos Todos Tenemos Un Poco” En 1998 lo comprobé, pues me dio un ataque creativo que me hizo parar
en un manicomio, para consolidar esta idea que al principio parecía alocada
pero un año después los resultados fuero maravillosos, tratar este tema como
pieza teatral fue un gran reto pues los actores y yo tuvimos que ir hasta los
lugares de reposo para compartir y vivir de cerca el abandono social que sufren
estos enfermos que parecieran fueran de otro mundo, con este trabajo quise homenajear a la vida, a los que hicieron su
propio mundo quizás para escapar de una
sociedad de hipócritas. O para enseñarnos que existen muchas formas de estar.
Esta pieza se estrenó con gran éxito n el Municipal de Puerto Cabello 1999, se presento en la U.C 3 veces, se presento en
Festival Mexico1999 con buen reconocimiento y critica, en el festival Avendit
obteniendo 2 premios unipersonales, en Rep. Dominicana, en pedagógico en
Maracay, en la U.C.V, lleva mas de 15 funciones Manicomino de Barbula es un a
gran pieza que me a regalado
satisfacciones.
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